Cómo reconocer un aceite de oliva virgen extra de calidad

El aceite de oliva virgen extra, o AOVE, es considerado el oro líquido de la dieta mediterránea. No solo es un ingrediente esencial en la cocina, también es un producto con una fuerte carga cultural y emocional. En Mallorca, este vínculo es aún más especial: la isla ha cultivado olivos durante siglos, y en S’Establit seguimos cuidando esa tradición para que cada cosecha conserve su autenticidad.

Qué significa “virgen extra”

La categoría virgen extra es la más alta dentro de los aceites de oliva. Para obtenerla, el aceite debe elaborarse únicamente con aceitunas sanas, recogidas en su punto óptimo y molturadas en frío, sin aditivos ni procesos químicos. Esto garantiza que conserve todos sus aromas y propiedades naturales. En S’Establit, nuestro aceite de oliva virgen extra ecológico nace de este respeto absoluto por el fruto, siguiendo un proceso que combina tradición y modernidad en nuestra almazara.

Aromas y sabores que lo delatan

Un AOVE de calidad se reconoce, sobre todo, por lo que transmite a los sentidos. Su aroma debe ser fresco, evocando la hierba recién cortada, el tomate, la manzana o la almendra. En boca debe presentar equilibrio, con un toque amargo y un ligero picor que reflejan la presencia de antioxidantes y polifenoles, responsables de sus beneficios para la salud. En S’Establit cultivamos tres variedades que ofrecen perfiles distintos: la suavidad del empeltre, la intensidad del picual y la frescura afrutada de la arbequina. Cada una aporta un matiz propio, y juntas enriquecen nuestras catas y experiencias.

 Fíjate en la etiqueta y el envase

La etiqueta y el envase también ayudan a identificar un buen aceite. El vidrio oscuro o la lata son los formatos ideales para protegerlo de la luz y del calor, preservando sus cualidades durante más tiempo. En S’Establit creemos que la frescura es un factor clave en la calidad. Además, nuestro aceite cuenta con la Denominación de Origen Oli de Mallorca, un sello que certifica su autenticidad, y con la certificación ecológica, que avala nuestro compromiso con el medio ambiente.

La importancia de catar

Más allá de las etiquetas y las certificaciones, la manera más fiable de reconocer un aceite de oliva virgen extra es catarlo. Al probarlo se revelan sus matices, desde los aromas más frescos hasta la intensidad del sabor. En S’Establit defendemos esta idea: solo al degustar el aceite en boca se comprende toda la riqueza que encierra y el vínculo que lo une a la tierra donde nace.En conclusión, un aceite de oliva virgen extra de calidad se distingue por su pureza, por la frescura de sus aromas y sabores y por la historia que lleva consigo. En S’Establit creemos que cada botella debe ser un reflejo fiel de nuestra tierra y de nuestro trabajo diario en el olivar. Por eso, cuando disfrutas de nuestro aceite, no solo pruebas un producto excepcional: también formas parte de una tradición que sigue viva en el corazón de Mallorca.

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